• La campaña JUVENA que anualmente lidera el centro tecnológico AZTI sitúa en 481.000 toneladas el número de ejemplares de anchoa menores de un año, más del doble que el anterior ejercicio.
  • Los resultados se sitúan un 80% por encima de la media histórica y garantizan un relutamiento medio alto para la campaña pesquera del año 2023.
  • El estudio, que cuenta con la cooperación del Instituto Español de Oceanografía (IEO) y la financiación del Gobierno Vasco y el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación, se ha llevado a cabo con un enfoque ecosistémico que promueve la sostenibilidad de la especie.

Pasaia, 1 diciembre 2022. La biomasa de anchoas menores de un año que se encuentra actualmente en las aguas del golfo de Bizkaia se sitúa en 481.000 toneladas. Son las cifras registradas por el último estudio anual JUVENA, liderado por el centro tecnológico AZTI, superando por más del doble los resultados del ejercicio 2021, cuando la cantidad de juveniles era de 208.000 toneladas.

Además, la estima de biomasa de juveniles de anchoa en 2022 se encuentra un 80% por encima del promedio de la serie histórica del estudio, que se realiza cada año como complemento de la campaña BIOMAN, que evalúa la población de la anchoa adulta al finalizar la primavera.

“Son unos muy buenos datos que nos permiten garantizar un reclutamiento medio alto para la campaña pesquera de 2023, ya que conociendo la cantidad de juveniles que hay en otoño, podemos anticipar cuál será el número de anchoas adultas que habrá en el golfo de Bizkaia en primavera y verano y planificar una pesca sostenible”, ha subrayado Rogelio Pozo, director general de AZTI.

Para recabar estos datos, investigadores de AZTI y del IEO se embarcaron desde mediados de agosto hasta principios de octubre en el buque oceanográfico ‘Emma Bardán’, de la Secretaría General de Pesca, y en el ‘Ramón Margalef’, del Instituto Español de Oceanografía (IEO), con el objetivo de recopilar los datos que ayuden a avanzar en el conocimiento del proceso de desarrollo de las anchoas, y de las variables que les afectan.

La campaña JUVENA se realiza, por tanto, con un enfoque ecosistémico y se analizan también aspectos importantes para el correcto desarrollo de la población de anchoas como las condiciones oceanográficas y otros componentes del ecosistema, como el plancton o los depredadores superiores de la anchoa (como aves o cetáceos).

juvena campaña juveniles anchoa

Cambios en la distribución espacial

Como viene observándose desde la recuperación de la población en el año 2010, la anchoa se distribuyó por todo el Golfo de Bizkaia, desde la costa hasta aguas oceánicas, tanto en la zona Cantábrica como en la plataforma francesa. Por otro lado, los análisis llevados a cabo por AZTI han mostrado que la distribución espacial de la anchoa juvenil se vio afectada por  la presencia de una capa superficial de plancton, denominada por los pescadores vascos como “zikiña”, muy abundante este año, y que parece ser evitada por la anchoa de forma activa. “Sin embargo, no es un hecho excepcional, sino algo que ya se ha visto en años anteriores” puntualizó el director de AZTI, Rogelio Pozo.

La campaña JUVENA está coordinada por el centro tecnológico AZTI con la colaboración del Instituto Español de Oceanografía (IEO) y cuenta con la financiación de la Secretaría General de Pesca del Gobierno de España y la Dirección de Pesca y Acuicultura del Gobierno Vasco.

Los resultados permiten efectuar recomendaciones a las autoridades pesqueras teniendo en cuenta las regulaciones actuales de explotación de la anchoa, elaboradas por personal científico de AZTI, el IEO, el IFREMER y el organismo de la Comisión Europea STECF.

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